Metro de Madrid empeñado en desahuciarnos

Ayer día 07 de octubre nos reunimos con Silvia Roldán, actual consejera delegada del suburbano madrileño, en las instalaciones de Metro de la calle Cavanilles.

La reunión fue, como viene siendo habitual, “infructuosa y bastante decepcionante”. Metro de Madrid mantiene la amenaza de desahucio contra nosotros.

Recordemos que más de un centenar de negocios se han visto expulsados de los locales en los que realizaban su actividad en los últimos años, y, muchas veces, bajo la falsa promesa de que se reacondicionarían o se les reubicaría en nuevos espacios. Ninguno de los que cerró ha sido reubicado y, aunque Metro ha gastado millones de euros en reacondicionar  locales, estos permanecen cerrados y sin plan para su reutilización.

Los comerciantes de la AACMM denunciamos a la opinión pública que, a pesar de mantener nuestros pagos al día, Metro de Madrid decidió unilateralmente incumplir el convenio y rescindir los contratos. A este respecto, varios partidos políticos han anunciado que harán comparecer a Silvia Roldán el próximo 6 de noviembre ante la Asamblea de Madrid para pedirle explicaciones.

También está previsto que el PSOE, con el apoyo de Más Madrid y Unidas Podemos, presente una PNL dirigida a reactivar la actividad comercial en las instalaciones de Metro de Madrid, dando prioridad a emprendedores, autónomos y pymes de la región, y ofreciendo garantías jurídicas a nuestros negocios.

Como bien dice nuestro portavoz Francisco A. Ferrera, presidente de Red Autónomos: “la actuación de Metro de Madrid y la Consejería Regional de Transportes es especialmente preocupante. Dicen que cumplen con las medidas sanitarias contra la pandemia y nos encontramos con estaciones abarrotadas y poca frecuencia de trenes. Dicen que van a crear empleo y nos encontramos con la expulsión de los comercios. Dicen que Metro va a dejar de ingresar más de 40 millones de euros por el coronavirus, y se permiten tener cientos de locales vacíos sin que renten a las arcas públicas. En definitiva, Metro de Madrid sigue rodando hacia la estación desastre con paradas en amianto, aglomeraciones, púnica, retrasos, coronavirus y destrucción de empleo”.